Noruega y Alemania, han confirmado el desarrollo de una infraestructura de mantenimiento submarino de gran envergadura destinada a sostener su futura flota conjunta de submarinos Tipo 212CD. Ubicada en la base naval de Haakonsvern, cerca de Bergen, Noruega, está diseñado para soportar hasta nueve submarinos simultáneamente.
Oslo, Noruega – La confirmación de las dimensiones y el propósito de esta instalación llegó durante una actualización clave en la conferencia especializada UDT (Undersea Defence Technology) en marzo de 2025, donde representantes de ambas armadas detallaron los planes para el nuevo astillero. Situado dentro del perímetro de Haakonsvern, la principal base naval de Noruega, el complejo requerirá significativas obras de ingeniería submarina y extensos trabajos de hormigonado, preparando el terreno para lo que se convertirá en un nodo crítico para la operatividad de los avanzados sumergibles.
El momento elegido para la puesta en marcha de esta «instalación de mantenimiento común», como se la ha denominado oficialmente, no es casual. Se espera que esté plenamente operativa para 2029, coincidiendo con la entrada en servicio del primer submarino Tipo 212CD (Common Design), cuya construcción ya está en marcha. Este programa representa uno de los proyectos de adquisición de defensa más importantes para ambas naciones en décadas, buscando reemplazar y modernizar sus respectivas flotas de submarinos con una plataforma de última generación.
Actualmente, el pedido confirmado contempla diez submarinos Tipo 212CD (seis para Noruega y cuatro iniciales para Alemania, aunque Alemania tiene planes para dos más), pero las ambiciones podrían ser aún mayores. Se reveló que existe la posibilidad de ampliar el pedido conjunto hasta doce unidades, una decisión pendiente de la aprobación parlamentaria en Noruega prevista para finales de este año. Esta potencial expansión añade una capa adicional de justificación a la notable capacidad proyectada para las instalaciones de Bergen.
La capacidad anunciada para albergar hasta nueve submarinos – potencialmente tres cuartas partes de una futura flota ampliada – generó interrogantes sobre una posible sobrecapacidad. Sin embargo, el Ministerio de Defensa noruego, contactado para clarificar este punto, ofreció una perspectiva matizada. Lars Gjemble, portavoz del Ministerio, enfatizó la importancia de entender el concepto en su contexto adecuado: «Noruega apoya el enfoque común», afirmó, «pero es crucial comprender el significado previsto».
Gjemble aclaró que la cifra de nueve no implica que esa cantidad de submarinos estará en dique seco simultáneamente. “La sesión informativa [en UDT] buscaba explicar que la instalación de mantenimiento común está construida para apoyar una flota de hasta nueve submarinos; no para dar servicio a nueve submarinos al mismo tiempo”, distinguió. Explicó que el mantenimiento se planifica por ciclos programados, y las instalaciones están dimensionadas para gestionar esta carga de trabajo rutinaria, incorporando además un importante margen para contingencias e imprevistos. Las reparaciones no programadas y otros trabajos técnicos se abordarán según surja la necesidad y la conveniencia operativa.

Esta monumental instalación en Haakonsvern no será el único pilar del sostenimiento de la flota 212CD. Se contempla que parte del mantenimiento se realice en otros lugares, incluyendo las instalaciones del fabricante, Thyssenkrupp Marine Systems (tkMS), y una instalación satélite adicional que se establecerá en Wismar, Alemania. Este enfoque distribuido busca optimizar la disponibilidad y la eficiencia del soporte logístico.
Además, y de manera significativa, Noruega y Alemania no cierran la puerta a la expansión de esta colaboración. «Estamos abiertos a que otros socios se unan al programa y contribuyan a la gestión compartida del ciclo de vida«, declaró Gjemble. Señaló también los «beneficios industriales» que el mantenimiento compartido puede aportar a las naciones participantes. Naciones como Canadá, Grecia y Polonia ya han mostrado interés en adquirir la plataforma Tipo 212CD, y la infraestructura planificada parece haber sido diseñada con esta potencial expansión futura en mente.
Es fundamental destacar, sin embargo, que la nueva base en Haakonsvern está exclusivamente diseñada para la clase 212CD. «No hay planes ni capacidad para apoyar clases de submarinos de otras naciones», confirmó Gjemble, descartando explícitamente la posibilidad de dar servicio a modelos competidores como los futuros submarinos suecos de la clase Blekinge o los neerlandeses de la clase Orka.
En conclusión, la construcción de esta instalación en Bergen representa mucho más que un simple astillero; es un pilar fundamental de la alianza estratégica germano-noruega, una inversión a largo plazo en la disponibilidad y letalidad de sus futuras capacidades submarinas, y una plataforma diseñada con la flexibilidad necesaria para acoger, potencialmente, a nuevos socios en uno de los programas de submarinos convencionales más avanzados del mundo.
Referencias: NCC, Ministerio de Defensa de Noruega