Un buque de Emiratos Árabes Unidos, cargado con 2.500 toneladas de suministros vitales, ha atracado en el puerto israelí de Ashdod. La operación humanitaria, coordinada por Abu Dabi, busca aliviar la severa crisis alimentaria que asola la Franja de Gaza.
ABU DABI, EMIRATOS ÁRABES UNIDOS – En una operación logística y diplomática de gran calado, un buque con bandera de los Emiratos Árabes Unidos (EAU) ha conseguido atracar en el puerto israelí de Ashdod, abriendo una nueva vía para la entrada de asistencia humanitaria a la devastada Franja de Gaza. La embarcación transporta 2.500 toneladas de suministros esenciales, una carga destinada a paliar las catastróficas condiciones que enfrenta la población palestina.
Este despliegue no es un simple acto de caridad, sino una acción estratégica enmarcada en la «Operación Chivalrous Knight 3», una iniciativa de gran envergadura lanzada a finales de 2023 bajo la directiva del presidente emiratí, el Jeque Mohamed bin Zayed Al Nahyan. La operación, que se ejecuta en estrecha cooperación con la Media Luna Roja Emiratí y un conglomerado de organizaciones benéficas del país, refleja el creciente papel de Abu Dabi como un actor clave en la gestión de crisis regionales.
La carga, que incluye productos de primera necesidad como harina, leche, paquetes de alimentos y dátiles, representa un salvavidas para miles de familias al borde del colapso. El objetivo declarado es «apoyar a la población y aliviar su sufrimiento», en un contexto donde la hambruna amenaza directamente la vida de cientos de miles de personas, según han alertado múltiples agencias internacionales.
La llegada del buque a Ashdod, un puerto bajo estricto control de seguridad israelí, subraya la complejidad del escenario. Una vez descargada, la ayuda será transferida a convoyes de camiones que deberán cruzar los puntos de control para adentrarse en la Franja. Este corredor logístico es fundamental, considerando las enormes dificultades que enfrentan las agencias humanitarias para operar dentro del territorio.
La situación en Gaza sigue siendo crítica. La ofensiva militar ha dejado un saldo de miles de víctimas mortales, un número incalculable de desplazados y una destrucción sistemática de la infraestructura civil. La escasez de agua potable y alimentos, sumada al colapso de los servicios básicos, ha generado una crisis humanitaria sin precedentes, donde cada cargamento de ayuda se convierte en una batalla contra el tiempo y la burocracia.
Esta acción de los Emiratos Árabes Unidos no solo proporciona un alivio tangible, sino que también envía un potente mensaje geopolítico. Demuestra la capacidad de Abu Dabi para navegar las complejas relaciones diplomáticas en Oriente Medio, utilizando sus lazos con Israel —formalizados en los Acuerdos de Abraham— para facilitar el acceso a una población palestina aislada y en extrema necesidad.
Referencias: Middle East Eye, Al-jazeera