Hanwha Ocean, uno de los astilleros líderes de Corea del Sur, ha consolidado su posición al conseguir el contrato para la construcción de las dos primeras fragatas del lote IV del programa FFX de la clase Ulsan.
Seúl, Corea del Sur – Este proyecto, considerado una pieza fundamental en la modernización de las capacidades navales de la Armada de la República de Corea, representa una inversión estratégica de 839,1 mil millones de wones surcoreanos (aproximadamente 578,69 millones de dólares). El ambicioso plan tiene como objetivo completar la construcción de los buques para diciembre de 2030.
El inicio de una nueva era: el Batch-IV
El programa FFX Batch-IV marca la cuarta y última fase de un extenso proyecto de modernización destinado a reemplazar las fragatas de la clase Ulsan, que han estado en servicio desde la década de 1980. Este último lote incluirá un total de seis buques diseñados para afrontar los desafíos del entorno marítimo moderno. Aunque las nuevas fragatas mantienen una apariencia externa similar a las del Batch-III, las innovaciones en tecnología y diseño las convierten en modelos de referencia en lo que la industria denomina «fragatas inteligentes».
Estas embarcaciones incorporarán una combinación de sistemas de última generación que les permitirán operar de manera eficiente en escenarios de combate contemporáneos. Entre las mejoras tecnológicas se incluyen avances en sistemas de armas, capacidades de guerra electrónica y optimizaciones centradas en la sostenibilidad operativa y la calidad de vida de la tripulación.

Tecnología de punta: hacia una flota más inteligente y resiliente
El diseño y construcción de las fragatas Batch-IV hacen hincapié en la integración de tecnologías innovadoras. Estas embarcaciones están equipadas con un arsenal de sistemas de armas avanzados, entre los que destacan el misil antibuque C-Star, el torpedo antisubmarino Red Shark K-ASROC, el misil de crucero Sea Dragon y el misil tierra-aire de corto alcance K-SAAM. Además, se implementará un Sistema de Control de Ingeniería (ECS) desarrollado a nivel nacional, marcando un hito en la autonomía tecnológica del país.
La seguridad cibernética también ocupa un lugar preponderante en el diseño de los nuevos buques debido a las crecientes amenazas de la guerra electrónica y los ataques cibernéticos. En este sentido, las fragatas estarán equipadas con sistemas avanzados de monitoreo de ciberseguridad, combinados con mayor capacidad para defenderse de drones y sistemas no tripulados.
Uno de los elementos más destacados es la incorporación del Equipo de Guerra Electrónica-II, una tecnología avanzada desarrollada por la compañía surcoreana LIG Nex1, cuya finalización está programada para 2029. Este sistema promete sustituir al actual SLQ-200K Sonata con capacidades de interferencia que aumentarán significativamente la supervivencia de los buques en escenarios hostiles, posicionando al Batch-IV como una herramienta naval vanguardista.
Eficiencia operativa y el bienestar de la tripulación
En línea con las necesidades operativas actuales, las fragatas Batch-IV han sido diseñadas para maximizar la conservación de recursos humanos. Con sistemas automatizados y procesos optimizados, estas embarcaciones buscan reducir la dependencia de grandes dotaciones, lo cual responde a tendencias globales en la gestión del personal naval. Asimismo, los espacios de vida a bordo han sido rediseñados para mejorar las condiciones habitacionales de las tripulaciones, garantizando comodidad y funcionalidad en misiones de largo plazo.

El papel de Hanwha Ocean: un socio insustituible
La experiencia de Hanwha Ocean en la construcción de buques avanzados ha sido clave para posicionarse como un actor central en este ambicioso proyecto. La empresa ya tiene en su historial la construcción de los destructores KDX-I, KDX-II y KDX-III, así como de las fragatas del Batch-III, consolidándose como el principal proveedor de buques de superficie avanzados para la Armada surcoreana.
Yong-Jun Cho, jefe del equipo de ventas nacionales de buques de propósito especial de Hanwha Ocean, destacó el compromiso de la empresa en llevar la tecnología y la eficiencia operativa más allá de los estándares actuales. «Nuestros esfuerzos no solo se enfocan en cumplir, sino en superar las expectativas frente a los entornos operativos del siglo XXI. El diseño del Batch-IV introduce innovaciones sin precedentes que promoverán un cambio cualitativo en la defensa naval», subrayó con optimismo.

Perspectiva estratégica: preparación para los entornos de combate del futuro
Con la entrega de los últimos buques del Batch-III en curso, Hanwha Ocean ha reafirmado su intención de fortalecer aún más la capacidad defensiva nacional mediante el lanzamiento exitoso de los primeros barcos del Batch-IV. Los avances tecnológicos incorporados en esta nueva generación no solo aseguran un mejor desempeño en el campo de batalla, sino que también refuerzan la posición clave de Corea del Sur como líder regional en innovación militar.
A medida que los programas de modernización naval progresan, la Armada de la República de Corea se posiciona para mantenerse preparada frente a las amenazas emergentes, potenciando sus capacidades defensivas y proyectando su poder más allá de sus fronteras. El Batch-IV del FFX representa no solo una evolución en términos de diseño y tecnología, sino también un compromiso continuo con la seguridad regional y la autosuficiencia en defensa.
La adjudicación de este contrato a Hanwha Ocean subraya el papel crucial que desempeña esta empresa en los esfuerzos nacionales por consolidar una fuerza naval robusta y tecnológicamente avanzada. Todo apunta a que, una vez completado el proyecto, las fragatas Batch-IV establecerán un nuevo estándar en la guerra marítima moderna, marcando un hito en la historia militar de Corea del Sur.
Referencias: Hanwha Ocean