Francia avanza hacia la futura concepción de su portaaviones nuclear de nueva generación, conocido oficialmente como PA-NG (Porte-Avions de Nouvelle Génération). Según el reciente informe Naval Group, el principal constructor naval francés, se prevé que el encargo formal de este colosal buque ocurra a finales de 2025, destinado a reforzar la proyección naval europea hacia mediados de este siglo.

PARÍS, FRANCIA –  En un movimiento estratégico para modernizar su flota, Francia podría formalizar a finales de 2025 el encargo del PA-NG (Porte-Avions de Nouvelle Génération), un coloso de 78.000 toneladas, 310 metros de eslora y propulsión nuclear que se convertirá en el buque de guerra más grande jamás construido en Europa. El proyecto, liderado por Naval Group en colaboración con TechnicAtome y Chantiers de l’Atlantique, está diseñado para reemplazar al actual Charles de Gaulle, único portaaviones francés en servicio desde 2001, y asegurar la capacidad de disuasión e intervención rápida de la Armada hasta mediados de siglo.

El corazón del PA-NG lo constituirán dos reactores nucleares K22 de 220 MW cada uno, actualmente en fase de desarrollo bajo un contrato previo al lanzamiento (pré-DLR) adjudicado en abril de 2024 por la Dirección General de Armamento (DGA) y el Comisariado de Energía Atómica (CEA). Estos reactores, cuya producción se extenderá hasta 2029, alimentarán un sistema de propulsión totalmente eléctrico, con tres ejes accionados por turbinas y una autonomía ilimitada, permitiendo una velocidad máxima de 27 nudos.

Pero la verdadera revolución tecnológica radica en sus sistemas de aviación: tres catapultas electromagnéticas (EMALS) y tres sistemas de detención avanzada (AAG), suministrados por la estadounidense General Atomics bajo un contrato de 41,6 millones de dólares. Estas innovaciones, que reemplazarán los obsoletos sistemas de vapor del Charles de Gaulle, ofrecen ventajas clave:

  • Mayor cadencia de lanzamiento (hasta un 30% más rápida).
  • Capacidad para operar aeronaves de distintos pesos, desde el futuro caza NGF (Next Generation Fighter) del programa FCAS/SCAF hasta drones de combate (UCAV).
  • Reducción del estrés mecánico en las aeronaves durante el aterrizaje.

Aunque el Ministerio de las Fuerzas Armadas aún debate si instalar dos o tres EMALS, el diseño del buque está preparado para soportar la opción triple, lo que garantizaría redundancia operativa y mayor flexibilidad en misiones críticas.

El PA-NG albergará un ala aérea de más de 40 aeronaves, incluyendo:

  • Rafale M (hasta 2040-2050).
  • NGF (caza de sexta generación, con 35 toneladas de peso, bahías internas de armas y tecnología stealth).
  • E-2D Advanced Hawkeye (alertas temprana aerotransportada).
  • Helicópteros NH90 Caïman Marine y H160M Guépard.
  • Drones de vigilancia y combate (UCAV) integrados en el programa FCAS.

La cubierta de vuelo, de 17.000 m² (5.000 más que su predecesor), contará con dos elevadores de borde capaces de manejar dos Rafale simultáneamente y un hangar de doble altura que abarca dos tercios del buque.

El PA-NG incorporará un sistema de combate modernizado, con:

  • Radar Sea Fire AESA de Thales (cuatro paneles fijos para cobertura 360°).
  • 24 misiles MBDA Aster en lanzadores verticales (VLS), duplicando la capacidad defensiva del Charles de Gaulle.
  • Cañones Bofors de 40 mm y lanzadores Simbad-RC con misiles Mistral 3.
  • Potencial para integrar armas láser o de microondas en el futuro.

La construcción, asignada al astillero Saint-Nazaire —el único en Francia con un dique seco capaz de albergar el buque—, enfrenta obstáculos logísticos debido a la saturación de proyectos civiles (como cruceros valorados en 1.500 millones de euros cada uno). El calendario prevé:

  • Inicio del ensamblaje del casco: 2031-2032.
  • Traslado a Toulon en 2035 para pruebas y carga del reactor.
  • Entrega operativa: 2038.

El coste estimado superará los 10.000 millones de euros, y aunque inicialmente se barajó construir dos portaaviones, las restricciones presupuestarias hacen inviable una segunda unidad a corto plazo.

Mientras el PA-NG avanza, el Charles de Gaulle se someterá entre 2027 y 2028 a su última gran modernización, incluyendo la instalación del radar Sea Fire y misiles Aster 15 EC (con alcance extendido a 60 km). Un estudio paralelo evalúa si sus reactores K15 —en servicio desde 1998— podrían operar más allá de 2038, lo que brindaría un margen ante posibles retrasos.

Emmanuel Macron relanzó el programa en diciembre de 2020, optando por la propulsión nuclear para garantizar disuasión global y proyección en el Indopacífico, región prioritaria para Francia. El PA-NG no solo será un símbolo de soberanía tecnológica, sino también un nodo clave en redes de combate multidominio, alineado con iniciativas como el JADC2 estadounidense.

Con su entrada en servicio, Francia reafirmará su lugar como potencia naval líder en Europa, capaz de desplegar poder aéreo en cualquier rincón del globo con un buque diseñado para dominar los océanos hasta 2070.

Referencias: Naval Group, France24