El legendario portaaviones USS Nimitz, el más antiguo en servicio de la Armada de Estados Unidos, ha zarpado para lo que podría ser su misión final antes de ser formalmente retirado, en 2026. Este despliegue representa un tributo al legado de un buque que ha sido el pilar de numerosas misiones clave desde su entrada en servicio en 1975.
Washington D.C., Estados Unidos – Partiendo desde la Estación Aérea Naval North Island en San Diego, el USS Nimitz navega con rumbo hacia la región del Indopacífico, zona estratégica para los intereses de seguridad y defensa de Estados Unidos. Este destacamento culminará previsiblemente en 2026, cuando el Nimitz será desmantelado después de medio siglo de actividad, y sus componentes recuperables serán destinados al mantenimiento de otros portaaviones gemelos de su clase.
El portaaviones encabeza el prominente Grupo de Ataque del Portaaviones Nimitz, compuesto por nueve escuadrones del Ala Aérea 17 y cuatro destructores de misiles guiados clase Arleigh Burke del Escuadrón de Destrucción 9. Esta potente agrupación militar vuelve a desempeñar un rol esencial, con el objetivo principal de garantizar la seguridad, estabilidad y libertad de navegación en una región vital para el intercambio global y las relaciones internacionales.



Durante su trayectoria, el USS Nimitz, considerado uno de los buques más imponentes del mundo, ha participado en hitos históricos y operaciones clave que moldearon la seguridad global. Desde sus despliegues iniciales en el Mediterráneo en los años 70 hasta su papel destacado en conflictos como la Operación Tormenta del Desierto, la Operación Southern Watch y la Operación Libertad Iraquí, el Nimitz ha sido un testigo inquebrantable de la evolución de la estrategia militar moderna. Más recientemente, en 2023, el buque completó un despliegue de seis meses en el Indo-Pacífico, donde participó en el Ejercicio Global a Gran Escala del Comando Indo-Pacífico de Estados Unidos y en operaciones humanitarias tras el paso del devastador tifón Mawar en Guam.
El comunicado oficial de la Armada subraya que esta nueva misión continuará reforzando el compromiso de Estados Unidos con un Indopacífico «libre y abierto», colaborando con aliados y socios para salvaguardar la paz y la prosperidad regional. Más allá de su objetivo estratégico, este último viaje simboliza el espíritu de cooperación y diplomacia impulsado por la Marina, consolidando el legado del USS Nimitz como un símbolo de fuerza y estabilidad internacional.
Al cumplir 50 años de servicio, el USS Nimitz deja tras de sí una estela imborrable de logros y sacrificios, proyectando el poder marítimo de Estados Unidos, construyendo alianzas estratégicas y garantizando la seguridad global. Su retiro marcará el fin de una era para la Armada, pero su lugar en la historia está asegurado como uno de los buques más emblemáticos y fundamentales en el esfuerzo por preservar el equilibrio y la paz mundial.
Referencias: BBC, Navy Times