China ha dado a conocer su nuevo portaaviones anfibio Tipo 076, nombrado «Sichuan», durante una sofisticada ceremonia de botadura en el astillero Hudong-Zhonghua, ubicado en la isla Changxing.


Shanghái, China – En un evento que subraya la creciente ambición naval de China, la ceremonia de botadura del portaaviones anfibio Tipo 076, denominado «Sichuan», tuvo lugar el 27 de diciembre en el astillero Hudong-Zhonghua, ubicado en la isla Changxing, Shanghái. Esta ocasión no solo simboliza un avance considerable en la capacidad de proyección de fuerza del Ejército Popular de Liberación (PLAN), sino que también marca un paso significativo en el desarrollo de tecnologías navales avanzadas.

El «Sichuan» se ha proyectado con un desplazamiento superior a las 40.000 toneladas, superando significativamente a su predecesor, el LHD Tipo 075. Con una longitud aproximada de 260 metros y una manga de cerca de 50 metros en la cubierta de vuelo, el nuevo portaaviones se posiciona como uno de los más grandes del mundo, alcanzando dimensiones comparables con las clases Wasp y America de la Marina de los Estados Unidos.

La construcción del «Sichuan» se ha llevado a cabo a un ritmo notable, con el montaje del casco realizado en un período de aproximadamente 14 meses, evidenciando un proceso de producción eficiente y acelerado. Desde el inicio de su construcción, se observó que los primeros módulos fueron trasladados al astillero en octubre de 2023. Las instalaciones de Hudong en la isla Changxing, inauguradas recientemente para desahogar el congestionado río Huangpu, se han convertido en un crucial centro de fabricación naval y son responsables de la construcción de buques anfibios para el PLAN.

El diseño del Tipo 076 introduce innovaciones significativas, siendo la más destacada la inclusión de una catapulta electromagnética, similar a la del primer portaaviones de superpotencia de China, el CV-18 «Fujian». Esta característica le permitirá operar aeronaves de ala fija, algo inédito para los portaaviones anfibios hasta ahora. Aunque se ha especulado sobre el posible uso de vehículos aéreos no tripulados, el «Sichuan» también estará capacitado para operar con misiles avanzados y una variedad de aeronaves, incluidas posibles aeronaves tripuladas como el J-35.

En términos de diseño, el «Sichuan» se distingue de su predecesor por la disposición de sus elevadores de aviación y su configuración de propulsión. A diferencia del Tipo 075, que utiliza motores diésel, el nuevo portaaviones adopta un sistema de propulsión por turbinas de gas (COGAG), lo que le permitirá alcanzar velocidades operativas superiores y facilitar el lanzamiento de aeronaves a través de la catapulta. Se ha documentado que esta clase de buque también incorporará tecnologías de propulsión híbrida, lo que representa un avance en la sostenibilidad y eficiencia operativa.

El armamento y los sistemas de defensa del «Sichuan» son igualmente impresionantes, incluidos misiles HQ-10 y sistemas de armas de corto alcance para autodefensa, como los CIWS H/PJ-11. Además, la integración de sensores modernos permitirá al portaaviones operar efectivamente en entornos de combate contemporáneos.

Posterior a su lanzamiento, se prevé que el «Sichuan» pase por un extenso período de equipamiento, incluyendo la instalación de su armamento y sistemas de defensa. Esta fase es crucial para asegurar que el portaaviones esté completamente operativo y listo para cumplir con las exigencias de misiones modernas.

Desde 2019, China ha mostrado un compromiso continuo con el fortalecimiento de su flota, botando un portaaviones o un portaaviones anfibio cada año. Este ritmo acelerado de construcción reafirma la capacidad del país para adaptarse y responder a las dinámicas geopolíticas en constante evolución, y pone de relieve su ambición de establecerse como una potencia naval global.

La presentación del «Sichuan» no solo representa un despliegue de poderío militar, sino también una manifestación del ingenio industrial chino, que avanza rápidamente hacia la vanguardia de la tecnología naval. Con este nuevo portaaviones, China está bien posicionada para ampliar su influencia en los mares del mundo, marcando un nuevo capítulo en su historia militar y marítima.

Referencias: Xinhua