Trump designa a China, Pakistán, India y Afganistán como principales países de tránsito y producción de drogas ilícitas
El presidente Donald Trump designó a China, Pakistán, India y Afganistán como países de tránsito y producción de drogas ilícitas en su determinación presidencial 2026. La medida, publicada el 15 de septiembre en Washington, advierte sobre eventuales sanciones y presiones diplomáticas.

Washington D.C., Estados Unidos / 15 de septiembre de 2025 — La Casa Blanca formalizó este lunes la determinación presidencial para el año fiscal 2026 en materia de control de drogas ilícitas, señalando a China, Pakistán, India y Afganistán como países prioritarios en la lista de tránsito y producción. El documento, titulado “Presidential Determination on Major Drug Transit or Major Illicit Drug Producing Countries”, establece que estas naciones deberán cumplir sus obligaciones internacionales y cortar los suministros ilícitos, o de lo contrario enfrentar “graves consecuencias”.
El presidente Donald Trump, en un mensaje emitido desde Washington, subrayó que la lucha contra el narcotráfico está directamente ligada a la crisis de opioides en Estados Unidos, donde el consumo de fentanilo y otras drogas sintéticas provoca decenas de miles de muertes al año. “Más del 40% de los estadounidenses conoce a alguien que ha muerto por sobredosis”, enfatizó, calificando de “inaceptable” el promedio diario de fallecimientos registrados en 2024.

La lista difundida por el Departamento de Estado no se limita a Asia. Incluye 14 países de América Latina —entre ellos Colombia, México, Perú y Venezuela—, además de tres del Caribe y otras naciones de Asia, como Birmania y Laos. Washington aclaró que la inclusión de un país en esta clasificación no implica un juicio directo sobre el nivel de cooperación con Estados Unidos, sino que responde a su papel en las cadenas de producción y tránsito globales.
El trasfondo diplomático es complejo. Con China en el listado, el señalamiento se interpreta como un desafío directo en medio de las tensiones estratégicas entre Pekín y Washington. En el caso de Pakistán y Afganistán, la preocupación apunta al control de laboratorios de metanfetaminas y a las redes que operan en zonas fronterizas difíciles de fiscalizar. Respecto a India, la administración Trump hace foco en el desvío de precursores químicos utilizados para la elaboración de opioides sintéticos.

La decisión abre la puerta a un mayor escrutinio internacional, así como a la imposición de condiciones más estrictas en cooperación, asistencia financiera y acuerdos bilaterales. Funcionarios de seguridad nacional señalaron que la Casa Blanca no descarta medidas de presión económica, restricciones migratorias e incluso sanciones focalizadas contra actores estatales o privados que faciliten el tráfico.
Analistas señalan que el anuncio busca enviar un mensaje claro: la lucha contra las drogas ilícitas es tratada por la administración Trump como una prioridad de seguridad nacional, con impacto directo en políticas migratorias, aduaneras y de inteligencia. La decisión podría tensar la relación de Washington con varios de los países designados, particularmente con aliados estratégicos en Asia y América Latina que ahora enfrentan el dilema de reforzar su cooperación antidrogas o exponerse a represalias diplomáticas y económicas.
Fuentes: AP, Politico, The Guardian