China exhibirá nuevos misiles hipersónicos y sistemas de defensa aérea en su desfile militar de Pekín
China prepara un imponente desfile militar en Pekín el 3 de septiembre, conmemorando el 80.º aniversario de la victoria sobre Japón. Entre sus novedades destacan misiles hipersónicos, sistemas antibuque avanzados y defensas antibalísticas, consolidando la modernización estratégica del Ejército Popular de Liberación.

Pekín, China / 27 de septiembre de 2025 — El Ejército Popular de Liberación (EPL) ultima los preparativos para un desfile militar de gran escala en la capital china, concebido no solo como una ceremonia conmemorativa, sino como una demostración calculada de poder militar y tecnológico. La fecha elegida —el 80.º aniversario de la victoria sobre Japón en la Segunda Guerra Mundial— refuerza el simbolismo nacional, mientras que la exhibición de nuevas armas envía un mensaje claro a Washington y a sus aliados regionales en el Pacífico.
Durante los ensayos realizados en las últimas semanas en las avenidas de Pekín, observadores independientes han identificado cuatro nuevos misiles de la familia YJ, junto con potenciales sistemas balísticos intercontinentales y avanzados interceptores de defensa aérea. Los misiles YJ-15, YJ-17, YJ-19 y YJ-20 han captado la atención de analistas internacionales, sugiriendo un salto en la capacidad de ataque de precisión y de negación marítima de China.
YJ-15: sucesor del YJ-12 en rol antibuque
El YJ-15, avistado en camiones lanzadores durante los ensayos, parece un diseño basado en estatorreactor, similar al YJ-12, actualmente uno de los pilares de la capacidad antibuque del EPL. Aunque no se han confirmado especificaciones oficiales, su morfología apunta a un misil de crucero supersónico capaz de ser lanzado desde buques, aeronaves y plataformas terrestres.
El YJ-12, con el que comparte rasgos externos, ya ha sido comparado con el misil soviético Kh-31, y su versión de exportación, el CM-302, ha demostrado incluso capacidad secundaria de ataque terrestre. De confirmarse mejoras en el YJ-15, China podría estar ampliando el alcance y la maniobrabilidad de su arsenal contra grupos de portaaviones y buques de superficie, consolidando su estrategia de anti-access/area denial (A2/AD) en el Mar de China Meridional.

YJ-17: posible misil hipersónico de planeo
El YJ-17 es probablemente el sistema más intrigante observado. Su morro estilizado y sin tomas de aire visibles han llevado a expertos a sugerir que podría tratarse de un vehículo hipersónico planeador lanzado por cohete, en lugar de un misil de crucero de propulsión sostenida.
De confirmarse, se trataría de un sistema análogo al DF-17, pero con un enfoque marítimo. Su capacidad para alcanzar velocidades superiores a Mach 5 y realizar trayectorias atmosféricas irregulares supondría un desafío formidable para las defensas antimisiles estadounidenses y japonesas. La mera introducción de este diseño apunta a que Pekín busca consolidar una capacidad de ataque rápido contra blancos estratégicos y navales.

YJ-19: estatorreactor hipersónico de nueva generación
El YJ-19 presenta un diseño más clásico, con una toma de aire frontal prominente bajo el morro, lo que indica un propulsor scramjet o estatorreactor avanzado. Este tipo de misiles requieren un cohete acelerador para alcanzar velocidad inicial, tras lo cual el motor hipersónico entra en funcionamiento.
Los misiles de este tipo están concebidos para penetrar defensas modernas, combinando altísima velocidad y capacidad de maniobra. Para los analistas, el YJ-19 podría constituir un paralelo chino a los desarrollos rusos como el Zircon, otorgando al EPL una herramienta para ataques de precisión contra buques de guerra de gran tamaño y bases costeras.

YJ-20: continuidad balística y proyección naval
El YJ-20 destaca por su semejanza con misiles balísticos navales, con una configuración multietapa y referencias a lanzamientos previos desde destructores Tipo 055. Algunas fuentes lo vinculan al enigmático YJ-21, aunque sin confirmación oficial.
Su diseño permitiría ser integrado en sistemas de lanzamiento vertical (VLS) de buques y submarinos futuros, en particular del proyectado submarino nuclear Tipo 095. Esto lo convierte en un componente clave de la futura capacidad de ataque naval chino, extendiendo el alcance de su poder más allá del Mar de China Meridional hacia aguas abiertas del Pacífico occidental.

Otros sistemas avistados: posibles ICBM y defensas HQ
Además de los misiles YJ, observadores han identificado vehículos de transporte de gran tamaño portando contenedores que no corresponden a modelos conocidos. Esto ha desatado especulaciones sobre la presencia de nuevos misiles balísticos intercontinentales (ICBM) o prototipos de largo alcance diseñados para reforzar el arsenal nuclear de China, que en los últimos años ha multiplicado la construcción de silos de lanzamiento.
En paralelo, se han avistado lanzadores asociados a la familia HQ de defensa aérea, incluyendo el HQ-9C, HQ-11, HQ-16, HQ-19, HQ-20, HQ-22A. La posible aparición de los HQ-26 y HQ-29, interceptores de gran altitud con potencial exoatmosférico, representaría un esfuerzo de Pekín por alcanzar una paridad estratégica en defensa antimisiles con Estados Unidos, similar a la capacidad del sistema SM-3.

Implicaciones estratégicas
El conjunto de sistemas vistos durante los preparativos indica que China busca mostrar no solo diversidad, sino también una integración creciente entre capacidades ofensivas y defensivas. Al exhibir en un mismo evento misiles antibuque, hipersónicos, balísticos y defensivos, Pekín pretende proyectar la imagen de una fuerza armada moderna y multidominio, capaz de disputar a sus rivales el control del espacio aéreo, marítimo y estratégico.
Este desfile, más allá de su carácter ceremonial, será leído en clave de advertencia geopolítica en Washington, Tokio y Taipéi. Las nuevas armas del EPL consolidan una tendencia que ya venía marcada por el despliegue del DF-17 y de sistemas antisatélite en los últimos años: China busca reducir la ventaja tecnológica de Estados Unidos en el Indo-Pacífico.
Fuentes: The War Zone, South China Morning Post