Japón de robustecer su posición militar en el Indo-Pacífico, el astillero de Mitsubishi Heavy Industries (MHI) en Nagasaki presenció el lanzamiento de la fragata «Nagara» (FFM-10), el décimo buque de la clase Mogami destinado a la Fuerza de Autodefensa Marítima de Japón (JMSDF).
Tokio, Japón – Este proyecto marítimo no solo representa un escalón estratégico en la evolución de la defensa japonesa frente a tensiones geopolíticas en la región, sino también el avance en la tecnología y versatilidad de sus embarcaciones militares.
Nombrada en honor al río Nagara, un afluente icónico que atraviesa la prefectura de Gifu y desemboca en la bahía de Ise, esta fragata de última generación suma un capítulo innovador a la historia naval japonesa. El nombre del buque rinde homenaje a su predecesor, un crucero ligero homónimo que sirvió bajo la Armada Imperial Japonesa, integrando la tradición con las necesidades contemporáneas de defensa del país. La construcción y puesta en servicio de este buque enfatizan el rol preponderante que Japón busca desempeñar en la seguridad de la región del Indo-Pacífico.
Un diseño estratégico frente a los desafíos regionales
El lanzamiento de la «Nagara» se da en un contexto marcado por un aumento de actividades militares de potencias como China y Rusia en zonas marítimas adyacentes a Japón. Desde ejercicios conjuntos en el Mar de Japón entre ambas potencias hasta la disputa territorial en las islas Senkaku/Diaoyu en el mar de China Oriental, Tokio refuerza su estrategia de defensa para proteger su cadena de islas Nansei, un territorio estratégico que se extiende desde Kagoshima hasta Okinawa, en dirección a Taiwán.
Para contener estas amenazas, las fragatas de la clase Mogami han sido diseñadas como buques compactos, ágiles y altamente armados, con una amplia capacidad para realizar misiones de vigilancia, control de áreas marítimas y respuesta ante incidentes en aguas nacionales. En concreto, el «Nagara» cuenta con un desplazamiento de 3.900 toneladas, una longitud de 133 metros, una manga de 16,3 metros y un calado de casco de 9 metros, todo optimizado para misiones de largo alcance y alto rendimiento. Este buque es propulsado por un innovador sistema de propulsión combinado de gas y diésel (CODAG) que utiliza dos motores diésel MAN 12V28/33D STC y una turbina de gas Rolls-Royce MT30, capaz de alcanzar velocidades superiores a los 30 nudos.

Avances tecnológicos y capacidades armamentísticas
El «Nagara» también destaca por su equipamiento de última generación, lo que refuerza sus capacidades multifuncionales. Entre sus sistemas de armamento se incluyen:
- Un cañón naval BAE Systems Mk 45 Mod 4 de 5 pulgadas (127 mm).
- Sistemas de armas remotas de 12,7 mm de Japan Steel Works.
- Misiles antibuque MHI Tipo 17 (SSM-2) y memoria RAM SeaRAM de Raytheon.
- Un radar multifunción Mitsubishi Electric OPY-2, sensores electroópticos y sonares de última generación que optimizan tanto la defensa submarina como la detección de minas.
Además, aunque el sistema de lanzamiento vertical (VLS) aún no ha sido instalado en los buques de esta clase, Japón tiene presupuestada su implementación próxima y prioritaria en otros modelos, como el JS Niyodo (FFM-7) y el JS Yubetsu (FFM-8), antes de expandir su aplicación a toda la flota de la clase Mogami. Esta tecnología permitirá a las fragatas mejorar sus habilidades para interceptar ataques aéreos, asegurar zonas marítimas críticas y responder ante amenazas emergentes.
El programa Mogami y la nueva generación de fragatas japonesas
El programa Mogami, que contempla la construcción de 12 fragatas hasta el final del año fiscal 2023, constituye un eje estratégico de modernización naval para Japón. Su finalización dará paso a una nueva generación de fragatas multifunción, cuyo diseño —basado en las lecciones aprendidas con la clase Mogami— permitirá mejorar aún más las capacidades de la JMSDF. Se estima que esta nueva flota, cuyo desarrollo comenzará en 2024, entrará en servicio a partir de 2028, con un objetivo de completar hasta 12 buques adicionales para el año fiscal 2032.
Mitsubishi Heavy Industries sigue a la cabeza de este ambicioso proyecto, compitiendo además en el mercado internacional con un diseño mejorado de la clase Mogami. Ejemplo de ello es su colaboración con la alemana Thyssenkrupp Marine Systems (TKMS), compitiendo juntas para desarrollar fragatas avanzadas para la Marina Real Australiana (RAN), así como su propuesta para suministrar fragatas a la Marina de Albania.

Colaboración internacional: un pilar del desarrollo militar japonés
Además de fortalecer su armada, Japón está ampliando su alcance mediante alianzas estratégicas. En un reciente Memorando de Implementación (MOI) firmado entre Tokio y Nueva Delhi, se acordó la exportación de sistemas de antenas furtivas integradas, utilizadas en la clase Mogami, a la Marina de la India. Este acuerdo no solo refuerza los lazos bilaterales, sino que también marca la segunda vez que Japón exporta tecnología de defensa completa, siguiendo la entrega de sistemas de radar a Filipinas, destacando el papel emergente de Japón como un jugador clave en la transferencia de tecnología militar en Asia.
Proyecciones de liderazgo en el Indo-Pacífico
Con la botadura del «Nagara», Japón reafirma su compromiso con la seguridad y estabilidad en un entorno marítimo cada vez más complejo. Este nuevo buque se une a una estrategia integral que combina avances tecnológicos, colaboración internacional y una visión firme para mantener el equilibrio de poder en una región atravesada por tensiones geopolíticas. Conforme la JMSDF continúa ampliando y modernizando su flota, queda claro que no solo pretende defender su soberanía territorial, sino también posicionarse como un actor clave en la protección de rutas marítimas y el mantenimiento de la paz en el Indo-Pacífico.
El «Nagara», como símbolo de este esfuerzo, no es simplemente una fragata más, sino un ejemplo tangible del renovado compromiso de Japón con su propia seguridad y la de sus vecinos. A medida que este buque se prepare para entrar en servicio en 2026, Japón enviará un mensaje inequívoco al mundo: está listo para enfrentar los desafíos crecientes de su entorno estratégico.
Referencias: Mitsubishi Heavy Industries, Yomiuri Shimbun